Show y negocios

Independientemente de tu opinión sobre Jaime Maussan, el tipo nunca deja de empujarse para conseguir más atención.

A tus emprendimientos y a los míos no les vendría mal aprender esto de él para elevar nuestro showmanship.

Y si piensas que esto de generar espectáculo para las masas es ridículo y no va con hacer buenos negocios, bueno, te aviso que Apple acaba de liberar un video donde Tim Cook y su staff interactúan con la Madre Naturaleza encarnada en una mujer afroamericana sarcástica, lo cual en cualquier otro contexto que no luciera tan elegante y pro como el de sus headquarters, sería irrisorio por decir lo menos.

Ahora, ¿cuál es el objetivo final del "investigador del fenómeno OVNI" al llevar restos de aliens al Congreso de México? Tampoco tenemos que ofendernos, porque su propósito es exactamente el mismo que el tuyo, el mío y el de cualquier persona que tiene que poner pan en la mesa: conseguir más y más recursos. Su intención es que se aprueben leyes que obliguen al Estado a financiar "investigaciones" de los extraterrestres. ¿Y quién se va a beneficiar de esto? Pues los "expertos" como él que llevan décadas estudiando esto y que están bien posicionados para abordar este nuevo mandato. Ahora, tú y yo podemos encontrar todo esto chistoso —si somos amables— pero es una estrategia nada tonta en un entorno político donde muchísimas cosas se están revolviendo desde el día uno del cambio de gobierno que hemos tenido. Si este tema de naves espaciales consigue tracción en la imaginación popular y sirve para abonar a distracciones que convengan a nuestros líderes populares, no dudes que tendrá presupuesto. ¿Quién será el "tonto" entonces?

Ahora, el CEO de Apple actuando en un mini-clip, practicando su discurso con nerviosismo porque tiene que rendirle cuentas a su supervisora (Mother Nature) es algo inaudito en la historia de la compañía. ¿Por qué lo hacen? ¿No tenían algo mejor que presentar? Este es un esfuerzo titánico de Apple para conseguir enviar una señal dentro de tanto ruido del mundo. Apple está teniendo problemas en China en este instante y necesitan mantener su aura de empresa innovadora y sostener también su buena relación con ellos y el resto de gobiernos fuertes. Una corporación global es como un político de altísimo nivel: están expuestos a los vaivenes de la opinión pública que pueden llevarlos fácil y rápidamente a juicios, penalizaciones y mucho más si no juegan bien el juego de posicionar adecuadamente su imagen. Apple tiene que mostrarse humana y —al mismo tiempo— tener contentos a muchos gobiernos. Esto no lo logras con un comercial —eso es para que tú y yo no los critiquemos por ese lado y mantenernos tranquilos. La manera en que Apple mantiene a raya los ataques potenciales de gobiernos y organizaciones internacionales es "participando en" y "apoyando" sus programas de "sustentabilidad" y "esfuerzos a favor del medio ambiente" y "un mejor futuro" y "salvar al planeta" y bla bla bla.

A ver, sí, claro que a todos nos conviene esto, pero la realidad de los movimientos en las altas esferas es que todo aquí se mueve por conveniencias económicas. Con un presupuesto que sobrepasa a muchas naciones, Apple tiene la capacidad de comprar amigos "participando en" y "apoyando" sus iniciativas. Estos amigos le permiten seguir con su ritmo de crecimiento. 

Bien. Por todo esto, Tim Cook tiene que hacer show, grabarse haciendo ridiculeces que son el impuesto que le toca pagar para darle un toque vulnerable, humano y casual a la empresa más grande de la historia de la humanidad que no es en realidad nada de eso. 

Ya sea que necesites recursos o mantener las cosas controladas, saber hacer show cuando sea necesario es parte del kit de cualquier emprendedor de clase mundial. Si quieres crecer manteniéndote anónimo, con un sobrenombre en tus redes sociales y la foto de un cielo con estrellas, te estás engañando. Así no se juega el juego ya.

Muéstranos extraterrestres.

Conversa con la madre naturaleza.

Haz la ridiculez que te toca para poner o mantener el pan en la mesa.

Sé espectacularmente audaz.

Y selo ahora.

—A.