Hay poco que un chico idealista sin mentalidad de crecimiento pueda hacer para mejorar su realidad.
Casi nadie está pensando en los procesos que te convienen al máximo a ti. That’s your job. Ese es tu trabajo constante.
No puedes decir que eres un profesional de vanguardia si no trabajas a diario en hacer más relevante tu marca personal exponiendo tus ideas en diferentes redes y medios.
Si estás molesto con tu nivel socioeconómico, insatisfecho con tu salario, frustrado porque no recibes más responsabilidad, probablemente este artículo tiene muchos elementos que debes considerar.
Haz que los retos de tu vida normal dejen de lucir grandes con este hack.
Somos adictos a las narrativas simples. Esto nos afecta.
«Papelito habla» es una manera de ver la vida en modo vieja escuela. Ten habilidades comprobables.
Sentirte ridículo es simplemente que tu cuerpo y mente están aprendiendo algo nuevo.
Pocas palabras. Gran diseño. Excelente historia. Entonación. Estudia teatro. Sé un personaje interesante al frente. Sé simple y elegante.
Lo opuesto a la perfección es la ejecución, no la imperfección.
Abandona esa fácil idea de que eres el único al que no le resultan bien sus proyectos o que no está muy seguro de lo que está haciendo.
Programa tu mente. Levántate temprano. Buena actitud. Sé necio y ejecuta lo que importa.
Abandona la mentalidad de auto-empleado y emprendedor. Notas para confiar y delegar.
Cinco características sobresalientes para distinguirlos.
El segundo cambio de paradigma. Imagina que estamos presenciando la conversación de un adolescente, catorce años, hablando con su papá…
La verdadera inteligencia es la capacidad de sostener desapasionadamente ideas opuestas en nuestra cabeza.
Deja que Maquiavelo cimbre tu vida.
Uno de los problemas que la mayoría de la gente tiene es que no les gusta sentirse ridículos ni que los demás se rían de ellos. Esto los hace débiles, lentos, inseguros.
Consigue la mayor cantidad de beneficio con el menor esfuerzo posible.
Aquello con lo que ayer destacábamos, hoy es moneda común. Por esta razón, es importante estar siempre atento a los trenes que llevan a caminos nuevos.
El pensamiento de segundo grado es una de las marcas de profesionalismo más grandes que existen.